En las aeronaves redecoradas, los pasajeros tendrán la oportunidad de revivir las décadas de los 70 y 90 y experimentar un viaje en el tiempo, que el museo de la compañía ofrecerá a los visitantes a partir del 13 de junio
São Paulo, 8 de junio de 2010 – Los pasajeros del puente aéreo Rio-São Paulo pueden, a partir del día 24 de mayo, revivir los momentos que marcaron la historia de TAM en las décadas de 70 y 90, en una iniciativa inédita en el sector. Bautizado como Vintage, el proyecto pondrá en funcionamiento dos aviones con el objetivo de recuperar la memoria y valorar la cultura de la empresa, que nació en el interior de São Paulo y se convirtió en la mayor compañía aérea del país, presente en todos los estados brasileños y con una fuerte actuación internacional. El Espíritu de Servir y la Pasión por Volar, que forman parte del ADN de TAM y son las bases de sus valores, serán reforzados con actitudes, servicios y productos que recuerden al pasado.
El Vintage forma parte de un nuevo proyecto mayor: la reforma y la ampliación del Museo TAM, en São Carlos, en el interior del estado de São Paulo. Sueño de los hermanos Rolim y João Francisco Amaro, el espacio comenzó a ser concebido en 1993 y se abrió, con carácter experimental al público en 2006, como uno de los museos más significativos del mundo y el de mayor tamaño propiedad de una empresa aérea en América Latina. Dos años después, en julio de 2008, decidieron reconstruirlo extendiendo su área útil de 9.500 m² a 20.000 mil m² y convertirlo en más moderno y completo. La reapertura al público está prevista para el 13 de junio.
"El Museo TAM y el proyecto Vintage son una forma de rescatar nuestro pasado- no sólo de la compañía sino también de la aviación- para ayudar a construir y guiar nuestro futuro. Nuestra memoria y nuestros valores son el fundamento para la continuidad de una historia", afirma Manoela Amaro, directora de Marketing de TAM.
Desde el inicio, la bandera roja, la presencia del comandante en la puerta del avión, la banda de bienvenidos a bordo, la sonrisa de los funcionarios y el respeto al pasajero construye la marca de TAM. “La simplicidad del acto de servir forma parte de nuestra esencia y debe orientar nuestra forma de pensar, actuar y relacionarnos. Estamos reforzando nuestra cultura con el proyecto Vintage, y nuestro pasajero lo va a poder experimentar. Vamos a llevar la experiencia de nuestro museo al día a día en el avión”, dice Manoela.
El estilo vintage aparecerá tanto en la pintura externa como en el interior de los aviones, que será revestido con los mismos patrones y texturas usados en los años 70 y 90: alfombras, cortinas y asientos idénticos a los de esas décadas. La tripulación usará uniformes de época y habrá un servicio de a bordo especialmente diseñado para este proyecto.
"El movimiento de recuperación del pasado debe ser realizado día a día para que todos reconozcan y continúen con lo que siempre hemos sido: apasionados por servir y ver a las personas más felices”, comenta la directora.
Dos experiencias diferentes
Dos aeronaves A319 recibirán pinturas especiales. Uno de los aviones contará con un estilo utilizado en la década de los 70, cuando se iniciaron las operaciones de la compañía en el área regional. El otro, llevará un modelo de los años 90, momento en el que se produjo la gran expansión de TAM y se reconocieron la calidad de sus servicios. Ambas van a operar exclusivamente las rutas de ida y vuelta entre Río de Janeiro (Santos Dumont) y São Paulo (Congonhas), diariamente.
El interior de los aviones estará ambientado de acuerdo con los modelos originales, incluye con tejidos idénticos a los utilizados en el pasado. El vídeo de seguridad, exhibido minutos antes del despegue, ha sido producido especialmente para las dos aeronaves Vintage. Emplea un lenguaje relajado y elementos de la época, como figuración de actores, animaciones y locución siempre manteniendo la seriedad que el tema de la seguridad requiere.
El servicio de a bordo también ha sido personalizado para el proyecto y será exclusivo para las dos aeronaves.
Las comidas serán servidas en la famosa y clásica maleta de la década de los 70. Los vasos exhibirán logos de la época y hasta el periódico de a bordo hará un viaje en el tiempo: en las páginas de Primera plana, los pasajeros podrán leer anuncios antiguos. Comandantes, copilotos y comisarios vestirán uniformes diseñados según el modelo de antaño.
El proyecto es una forma de reconocer a la tripulación por la calidad de su atención que demuestran día a día. La tripulación ha sido seleccionada especialmente para la ocasión, formando un equipo de elite que también tiene como objetivo entrenar a los más nuevos. “Además de trabajar en los vuelos, este equipo enseñará a las nuevas incorporaciones el nivel de excelencia en nuestro servicios que buscamos ofrecer siempre entre nuestros clientes”, explica la directora de Marketing.
Comentarios