Entrevista a Christina Oiticica


Entrevista a Christina Oiticica por Reginaldo Lima, “Movida Brasileña” en el Círculo de Bellas Artes, Madrid. 2 de julio de 2009


Reginaldo: Como os prometimos, estamos con Christina Oiticica. Christina, tu apellido es muy característico, cuéntanos, ¿de dónde proviene? ¿de qué parte del mundo es?

Christina: Pues mi apellido es del noreste de Brasil. Mi padre era de esa zona, concretamente de Alagoas. El apellido proviene de la zona del “sertão”, que es una zona semi-árida del nordeste de Brasil, donde hay un árbol con unas ramas muy grandes que dan una sombra preciosa.

R: ¿Cómo fue el cambio de salir de Alagoas y llegar al Camino de Santiago? Tuvo que causar mucho impacto en tu persona, cuéntanos, ¿cómo repercutió en ti ese cambio?

C: Pues hice por primera vez el Camino de Santiago en el año 90. Fueron treinta y ocho días a pie desde los Pirineos franceses. Estoy muy unida al Camino, ya que dejé varios cuadros en algunos puntos durante dos años. Me fascina el Camino de Santiago, es una experiencia muy intensa, realmente cambió mi vida. En realidad es una experiencia increíble que puedo compartir con mi marido ya que él también lo hizo en el año 86. Y también le cambió la vida.

R: Me gustaría saber de qué manera cambió tu pintura la experiencia de hacer el Camino de Santiago

C: Después de estudiar Bellas Artes en Brasil, me trasladé a los Pirineos franceses, aunque también frecuenté Madrid y el Círculo de Bellas Artes durante el año 86. ¡Me encanta Madrid!
Aunque volviendo al tema, decía que me trasladé a los Pirineos franceses pero no tenía el espacio necesario para pintar porque vivía en un hotel. Necesitaba terminar unos cuadros para una exposición en Francia, entonces, me fui al bosque y allí decidí pintar. A partir de ese momento comencé a percibir que la naturaleza interfería en mi trabajo y me di cuenta de que era mi circunstancia, como dijo Ortega y Gasset. Así que empecé a llevar los cuadros al bosque y a enterrarlos. Quise que la naturaleza dejase su huella dactilar en mi trabajo y de allí salió algo muy femenino, muy interesante.
Siempre he trabajado con signos femeninos, además siempre complemento mi trabajo con la energía de la Madre Tierra. El sacar los cuadros de la tierra es una experiencia muy emocionante y sobretodo especial.


R: Me pregunto si nunca te has encontrado en la situación de ir a buscar un cuadro y que de repente ya no esté

C: Sí, eso me ocurrió cuando fui a recoger los diez cuadros que había repartido por el Camino de Santiago, sólo encontré ocho, aunque sinceramente, prefiero pensar que se los llevó de regalo el propio Camino.

R: Cuando te ponías a pintar un cuadro, ¿en qué pensabas? ¿te salía directamente sin pensar? o era algo premeditado

C: Al principio, en muchas ocasiones, llevaba el cuadro ya acabado de mi casa, pero en el Camino de Santiago eso cambió, ya que llegaba al bosque con la tela en blanco y simplemente miraba alrededor. En primavera me quedé emocionada con las flores de los campos españoles. Hice toda una serie de cuadros pequeños, exactamente cincuenta y seis cuadros de flores de la primavera del Camino de Santiago. No todo mi trabajo fue hecho así, hubo veces que utilicé piedras, tierra… Realmente, eso dependía del sitio por el que pasaba. Siento esta exposición como algo muy especial. Significa además un cambio en mi trabajo porque como se puede ver son cuadros muy abstractos, lo que muestra un cambio en mi trayectoria.

R: Estamos ahora mismo en el Círculo de Bellas Artes de Madrid, donde tú has estado ya muchas veces, incluso has trabajado aquí. Cuando entras de nuevo, ¿no tienes ganas de hacer una exposición aquí?

C: La verdad es que tengo muchas ganas. Esta entrevista es muy simbólica para mí. Recuerdo que venía aquí hace más de veinte años a dibujar. El estar aquí de nuevo, en el Círculo de Bellas Artes y hablar de mi primera exposición en Madrid me resulta muy emocionante.

R: ¡Qué bien! Así que ésta es la primera exposición en Madrid

C: Sí, es la primera. Está en Biondetta, en la Calle Almagro 30 y estará hasta finales de julio, más exactamente hasta el día 29. ¡Me hace mucha ilusión!

R: ¿Qué obras se pueden ver actualmente en la exposición? ¿Son las que muestras en tu página web?

C: Sí, ciertamente, son las obras de esta exposición. En mi página web
http://www.christinaoiticica.com.br/ hay mucha información y están los cuadros que ahora estoy exponiendo. También está todo el proceso de mi trabajo sobre el Camino de Santiago. En febrero estuve en Japón para hacer el Camino Kumano, que es un camino hermano del Camino de Santiago, fui con la Oficina de Turismo del Camino de Santiago. Durante aquel viaje, dejé quince trabajos, que luego recogí.
Siempre camino, camino.
Mis cuadros son peregrinos y yo también.

R: Entonces, se podría decir que andando se hace el camino ¿no?

C: Sí, eso es, andando se hace el camino.

R: Después de haber viajado y haber conocido tantos lugares, haber pintado tantos cuadros y haber hecho tantos sueños realidad, me pregunto en qué sueñas hoy en día, si todavía quedan sueños por cumplir.

C: Pues he de decir que tengo muchos sueños. Uno de ellos es seguir trabajando cada vez más y poder llegar a exponer mis cuadros por toda la Tierra. Aunque debo decir que mi sueño más importante es poder trabajar siempre con mucho amor y muchas ganas.

R: Cualquier persona que vea tu obra podrá comprobar que el amor está permanentemente presente

C: Sí, es cierto. Siempre está presente. Para mí el trabajar es como una misión, esconder los cuadros y luego recogerlos, sentir, dibujar, transmitir… en resumen, todo.

R: ¿Hay pasión?

C: Sí, por supuesto. Hay mucha pasión.

R: Desde tu punto de vista, qué características destacarías de tu obra, pero me gustaría saber la opinión de la artista, no la del espectador

C: Pues como dije antes, siempre he trabajado con símbolos y signos femeninos. Empecé quizás de manera inconsciente, aunque poco a poco fui dándome cuenta. Utilizaba mucho los corazones, la transparencia, la fecundidad, en fin, ese tipo de signos. Desde mi punto de vista, cuando trabajas con la tierra te das cuenta de la textura que se va creando, y es una sensación que me encanta. No me refiero simplemente al aspecto visual, sino también a la energía. Porque en cada lugar en la Tierra hay una energía diferente y eso es lo que se plasma en mis cuadros. Muchas personas captan energías, yo las capto y trabajo con ellas. Es un vínculo entre la Tierra y yo.

R: Por lo que veo, España es un lugar que te gusta, ¿me equivoco?

C: ¡Me encanta España! Es un país realmente bonito y Madrid… Madrid es una maravilla... Hay mucho sol, mucha luz, mucha música en el ambiente y unas tradiciones dignas de admirar.

R: Se ve que estás siempre por el mundo entero, pero me pregunto en qué lugar sientes Brasil y por supuesto dónde se quedó Alagoas

C: Brasil para mí siempre está en un lugar privilegiado, tengo una gran conexión con ese país. Estuve incluso en el Amazonas cerca de Acre durante un año aproximadamente porque dejé unos cuadros por la floresta amazónica, recogiendo esas energías de las que hablábamos antes, salieron unas cosas preciosas de aquello. Sin duda Brasil es muy importante para mí. Me gusta muchísimo. Las personas, la comida, los amigos, es todo diferente. Y Alagoas, por supuesto siempre será especial.

R: Volviendo a tu Camino Peregrino, ¿qué consideras que eres? ¿una pintora peregrina o una peregrina que pinta?

C: Pues esa pregunta me hace pensar en que quizá sea un poco de ambas en cada momento. La exposición fue cambiando porque iba colocando los cuadros en la tierra y luego sacándolos. En el Puente de la Reina, luego León, en Ponferrada y así hasta llegar a Santiago, donde luego esos trabajos se pusieron en una iglesia maravillosa de la ciudad. Más tarde llegaron a Madrid y aquí estamos. En general fueron alrededor de unos cien trabajos. Así que supongo que tanto mi obra como yo somos muy peregrinos

R: Ciertamente se ve que eres una peregrina que no para de crear. ¿Pero de caminar…? ¿ Tienes pensado irte a alguna parte del mundo en especial? ó vuelves a casa, a Brasil

C: Ahora voy a disfrutar un poquito más de Madrid. Luego me iré a Francia donde me quedaré unos pocos días, después a Ginebra y más tarde a Estocolmo. Pero lo bueno de todo esto, es poder exponer mi obra. Así que lo de irme a casa tendrá que esperar un poco, pero ganas no faltan.

R: Y hablando de todo un poco… Me pregunto cómo afecta a una artista universal como eres tú, el cambio que estamos viviendo en todo el mundo. Por ejemplo, EEUU, con la elección de un presidente negro… que las mujeres os estéis abriendo paso con más fuerza cada día en la Sociedad, la Economía, la Política…

C: Considero que el cambio que estamos viviendo, como tú dices, es un paso muy bueno. El primer presidente negro de la historia representa no sólo la evolución evidente en el tema del color, sino que cada persona piensa de una manera propia y eso implica cambio. El cambio siempre es bueno, aunque en muchos casos dé miedo. Y con lo relativo al papel de las mujeres hoy en día, me resulta gratificante ver el esfuerzo hecho realidad, aunque todavía queda mucho por luchar, por ejemplo, en países islámicos en los que se necesita todavía mucho cambio en la mentalidad. La mujer sin lugar a dudas es diferente al hombre, pero no podemos negar que la participación femenina en todos los sectores es imprescindible.

R: Christina Oiticica ha sido un placer estar hoy contigo. Los micrófonos de Movida Brasileña están a tu disposición siempre que quieras. Ésta es tu casa y siempre serás bienvenida. Nos sentimos muy alagados de que hayas querido compartir con nosotros tu arte, siendo ésta la primera vez, que es un privilegio para pocos. ¿Quieres decir algo más a nuestros oyentes?

C: Sólo me queda decirles a los oyentes y todas las personas que han ido a ver mi exposición o que vayan a ir, gracias. Gracias de corazón. Ya que sin personas que aprecien el arte, todo perdería importancia. Y a ti, Reginaldo… ¡gracias! Gracias por todo, ha sido muy importante para mi encontrarnos hoy aquí, en el Círculo de Bellas Artes de Madrid.



Chritina Oiticica y Reginaldo Lima



“Movida Brasileña”, 2 de Julio de 2009

Círculo de Bellas Artes, Madrid


Traducción: Jessica Linville

Redacción: Sarah R. Abilleira

Foto: Juliana Dorneles



www.christinaoiticica.com.br

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