La caída de Dani Alves, una estrella mundial de futbol de nacionalidad brasileña y que además es uno de los campeones máximos en ese deporte, ha demostrado que toda la fama y todo el dinero que ganó a lo largo de los años no le han servido para aprender que nadie está por en cima de nadie.
Mintió nada más salir a la luz la denuncia de violación cuando dijo que no conocía la chica y que no había estado con ella, haciéndonos creer que ella era una oportunista, luego ante las pruebas contundentes en manos de la policia, tubo que retratarse y decir la verdad (si, hubo relación sexual en el baño de la discoteca sutton de Barcelona).
Llamado a declarar ante la justicia también contestó que ganaba 30 mil euros al mes en su nuevo trabajo mientras la jueza ya tenia en manos en este momento su contrato de trabajo donde especifica que 300 mil euros es lo que ganaba mensualmente. otra mentira más.
Dani Alves ha intentado desmerecer y perjudicar a la vítima al negar conocerla y también creyó que podría engañar a la jueza al contestar la pregunta. Eso demuestra que tenia intención de engañarnos a todos y perjudicar a la vitima doblemente; física y moralmente.
Su actual esposa le creyó y le apoyó hasta enterarse que efectivamente Dani le mintió y tubo relaciones sexuales con otra mujer en un baño de una discoteca. hoy por hoy ya no le apoya.
Su hermano, su primera mujer madre de sus dos hijos, y su madre le siguen apoyando y es comprensible.
Se han creído estar por encima del bien y del mal y ahora toca pagar. La policía española y el encargado de la discoteca Sutton se han portado de manera ejemplar al cuidar y proteger a la vitima, en todo momento la han arropado.
Dani Alves contrató un nuevo abogado, con ello intentará convencernos a todos de que su verdadero yo es aquél que hemos conocido a través de su instagram pero ya es demasiado tarde.
Santos Lima.
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